PODA DE FORMACION.
Es la primera poda y se realiza cuando se adquiere un nuevo ejemplar.
Consiste en moldear un árbol por lo que realiza una vez en la vida. Es recomendable efectuarla a principios del verano y se pondrá pasta selladora en cada corte, para evitar las infecciones y enfermedades.
La manera correcta y conveniente de efectuar este trabajo es hacer primeramente un boceto sobre papel y reflejar en él el final de lo que pretendemos tener con nuestro árbol.
El proceso de selección de ramas, debe basarse en el estilo de árbol que queremos hacer, recordemos que existen diferentes estilos de bonsai.
En primer lugar debemos observar el árbol con detenimiento y una vez decidido el estilo al que se adapta el Bonsái, se elige el frente.
Debemos dividir el tronco del árbol en tres tercios, el primero comienza en la base de raíces y el último termina en el ápice. El primer tercio se deja libre de ramas. En el segundo tercio del tronco se sitúa la rama principal que suele ser la que más destaca, ésta debe crecer lateralmente. Se podan todas las que queden por debajo de esta, las superiores se dejan de forma alterna a lo largo del tronco, una a la derecha, otra a la izquierda, atrás, etc. evitando que ninguna crezca hacia el frente hasta que llegar al tercer tercio, una vez allí las dejaremos crecer en todas las direcciones incluido el frente.
PODA DE MANTENIMIENTO
La poda de mantenimiento sirve para corregir el crecimiento de los árboles. Todas las ramas y brotes deben recibir luz. Eliminaremos todas las ramas que crezcan directamente hacia arriba o hacia abajo, las que se crucen con otras o las que crezcan hacia el interior.
La razón por la que se debe seguir esta regla es evitar que los brotes nuevos se ahoguen a causa de la falta de aire y luz.
Aplicando esta regla conseguiremos una silueta triangular, con una base más amplia que la copa. Se puede formar un Bonsái solo con las técnicas de poda, aunque los resultados más naturales se consiguen combinando esta técnica con la del alambrado.
La poda produce ángulos demasiado agudos en el tronco y ramas, mientras que el alambrado los produce suaves.
Se puede realizar este trabajo, en el invierno y durante la estación de crecimiento.
Si se realiza en invierno, se llama poda de aclareo. El objetivo de esta poda es el de ordenar el crecimiento de las ramas para la próxima estación vegetativa.
Si la realizamos durante la época vegetativa se denomina pinzado y actuaremos sobre los brotes verdes o semi-duros de ese mismo año.
PINZADO
El pinzado es la operación de cortar los brotes nuevos que van saliendo y que deforman el árbol. Los objetivos del pinzado son :
• Limitar su crecimiento para mantener la forma.
• Corregir su fuerza para que la ramificación aumente.
• Que las hojas sean cada vez más pequeñas.
El pinzado se efectúa durante toda su época activa, la forma de pinzar varía mucho según la especie de árbol que se trate.
Olmos
En estas especies, es preciso pinzar continuamente, pues su crecimiento es muy vigoroso, además así conseguiremos reducir el tamaño de las hojas muy fácilmente.
Arces
Los arces son muy estrictos en cuanto a la época del pinzado. Una vez abiertos los brotes, las hojas salen rápidamente, por eso, el pinzado debe efectuarse con rapidez, eliminando con los dedos el comienzo de la brotación del segundo par de hojas.
Frutales
Los frutales se deberán pinzar una vez pasada la floración, ya que la mayoría de ellos producen capullos en las puntas de las ramas, si lo hacemos antes no disfrutaremos del color y aroma de sus flores.
Pinos
En los pinos, efectuaremos el pinzado en mayo, cortando con tijeras totalmente el crecimiento de las velas más largas, por la mitad las que tengan una fuerza intermedia y las que sean muy pequeñas, no las tocaremos.
Piceas, abetos
El pinzado se efectúa con los dedos. En los árboles poco ramificados para aumentar su densidad, se eliminan totalmente las yemas nuevas tan pronto como estas adopten forma ovoide. En los árboles muy ramificados, se pinzan los dos tercios superiores de las yemas más fuertes.
LA DEFOLIACIÓN
La defoliación , es la eliminación de todas las hojas de una rama, es una técnica de poda radical que permite desarrollar en una sola estación la vegetación de dos años.
Se efectúa entre mayo y julio, cortando con tijeras limpias las hojas y dejando sobre la rama tan solo los pedúnculos foliares o un cuarto de la lámina foliar.
En la base del los pedúnculos, la rama emitirá rápidamente nuevas hojas de tamaño más pequeño,produciendo un agradable aspecto estético. La operación se efectúa sobre plantas que disfrutan de una optima salud.
Habrá que clarear muy a menudo las hojas de las plantas de hoja caduca para impedir la formación de antiestéticos hacinamientos.
La defoliación de algunas variedades de hoja caduca, permite aumentar el número de hojas, reduciendo su tamaño.
Se elimina casi por completo todo el follaje, dejando tan solo dos hojitas por rama, así de este modo se incentiva al árbol a producir una nueva cobertura de hojas. Esta defoliación se efectúa en junio o julio, y como ya se dijo anteriormente solo si la planta goza de muy buena salud.
Después del defoliado debemos tener especial cuidado con el riego ya que al estar desprovista de sus hojas, puede resentirse tanto por falta como por exceso de agua.